El hombre no tiene en este mundo más que un enemigo formidable, que son sus nervios.
La mente rige los nervios; y por tanto, si tenemos sosegada y tranquila la mente, no se alborotarán los nervios, sino que darán paz y sosiego al cuerpo.
El dinero no da la felicidad, pero aplaca los nervios.
El que ha naufragado tiembla incluso ante las olas tranquilas.
Para quienes no ansían sino ver, hay luz bastante; mas para quienes tienen opuesta disposición, siempre hay bastante oscuridad.
La ansiedad es un arroyito de temor que corre por la mente.
Si se le alimenta puede convertirse en un torrente que arrastrará todos nuestros pensamientos.
La amistad duplica las alegrías y divide las angustias por la mitad.
Quien guarda su boca y su lengua, guarda su alma de angustia.
Lo que mata al hombre es la ansiedad y no el trabajo.
La ansiedad es una forma de cobardía que amarga la vida de uno y la de los que le rodean.
El científico trata de satisfacer sus propias ansiedades humanas.
El cerebro se carga con la energía cotidiana, esa electricidad que pasa por delante de uno.
El miedo, la angustia, el odio, la muerte y la paz son lo que comunican.
Un banco es un lugar que te presta dinero siempre que demuestres que no lo necesitas.
Son signos de la superioridad del hombre la resistencia al trabajo, a la enfermedad y a las penas, la capacidad para el esfuerzo y el equilibrio nervioso.
No he logrado nada solo.
Millones de personas en todo el mundo ansiaban la paz. Por eso digo que no hay que minusvalorar el poder de la oración.
La intranquilidad, la precipitación y la angustia son síntomas de inmadurez o de falta de fe.La fe no es una abstracción, tiene corazón, sangre y nervios.
Buscad en la piel de un escéptico, y casi siempre hallaréis debajo los nervios doloridos de un sentimental.Tener los nervios a flor de piel.Ser un manojo de nervios.
Mi sistema operativo es multitarea: acaba con mis nervios y mi paciencia al mismo tiempo.
Debemos controlar los nervios: no hay que caer en la tentación.
Los nervios y la imprecisión se apoderan de la vulnerabilidad de la gente.
La educación que se da en las escuelas se limita al cultivo de la memoria, de los músculos y a ciertas reglas de urbanidad.
Equilibrio mental, estabilidad nerviosa, juicio recto, valor moral, audacia, resistencia al mal, tacto, forma de tratar al prójimo y manera de sacar el mayor bien de los contratiempos, cero.
Se le acaban los nervios a una persona cuando tiene que ser amable todos lo días con el mismo ser humano.
Algunos se esfuerzan tanto en ponerse bien, que se ponen nerviosos.
Nunca se llega a la posesión; y siempre a la angustia.La angustia es el vértigo de la libertad.La angustia es la disposición fundamental que nos coloca ante la nada.
La verdadera tranquilidad solamente se encuentra en la buena conciencia.
En medio de este atolladero de angustia encontré la fuerza para luchar y salir adelante.
La memoria, la concentración, la angustia, la tristeza, empiezan en el campo de las ideas, jamás son realidades absolutas.
Fúndete con la creación, déjate llevar, jamás tu angustia te hiera.
Los pájaros comen, el trigo crece, ¿qué te ha de faltar?Hay que seguir el camino que se aleja de todo, donde no está atajando la angustia, la muerte, el invierno, con los ojos abiertos entre el rocío.
Dios libra de la angustia al justo, y en su lugar pone al malvado.¿Cómo es posible entonces que la gente duerma entre saltos de angustia y horror?Es necesario romper el círculo de la angustia.
En todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en tiempo de angustia.
Sin el tiempo, esa invención de Satanás, el mundo perdería la angustia de la espera y el consuelo de la esperanza.Sólo el estanque tranquilo refleja las estrellas.
La angustia ecológica perturba el sueño de los mayores laboratorios del mundo.
En los momentos de ansiedad, no trates de razonar, porque el razonamiento se volverá contra nosotros mismos; es mejor que intentes hacer esas elevaciones y flexiones de brazos que se enseñan ahora en todas las escuelas; el resultado te asombrará. Así, el profesor de filosofía nos envía al de gimnasia.Quien lucha con nosotros nos refuerza los nervios y perfecciona nuestra habilidad.
Los problemas son aquellas circunstancias que ves cuando no tienes definido tu objetivo.
No hay grito más desgarrador que el susurro de la conciencia intranquila.
La oportunidad se deja alcanzar sólo por quienes la persiguen.
El que se ahoga no repara en lo que se agarra.
El más difícil no es el primer beso, sino el último.
No puede uno ser valiente si le han ocurrido sólo cosas maravillosas.
La conciencia de un jurado nunca queda tranquila.
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