El Evangelio meditado

Sos mi buen pastor

Sos mi buen pastor
Señor, haz de mi un instrumento de tu paz. Que allá donde hay odio, yo ponga el amor. Que allá donde hay ofensa, yo ponga el perdón. Que allá donde hay discordia, yo ponga la unión. Que allá donde hay error, yo ponga la verdad. Que allá donde hay duda, yo ponga la Fe. Que allá donde desesperación, yo ponga la esperanza. Que allá donde hay tinieblas, yo ponga la luz. Que allá donde hay tristeza, yo ponga la alegría. Oh Señor, que yo no busque tanto ser consolado, cuanto consolar, ser comprendido, cuanto comprender, ser amado, cuanto amar. Porque es dándose como se recibe, es olvidándose de sí mismo como uno se encuentra a sí mismo, es perdonando, como se es perdonado, es muriendo como se resucita a la vida eterna.

En el mundo...

Firma mi libro de visitas

El por qué de nuestro trabajo...

Publicado por Diego

Según cuenta la leyenda, un misionero cayó de un barco mientras navegaba en alta mar y fue arrastrado por el agua hasta la orilla de una remota villa de nativos. Personas de la villa lo encontraron y lo cuidaron y curaron ya que estaba casi muerto por la falta de comida y de agua fresca. Vivió entre ellos durante veinte años, adaptándose a su estilo de vida y forma de trabajo. No predicó sermones, ni tampoco les inculcó su fe. Tampoco les leyó ni recitó las Escrituras.

No obstante, cuando alguien se enfermaba, él se sentaba con el enfermo, a veces durante toda la noche. Cuando estaban hambrientos, les daba de comer. Cuando se sentían solitarios, les ofrecía un oído para escucharlos. Enseño al ignorante y siempre estuvo al lado del que se había equivocado.

Llegó un día en el que los misioneros entraron a esta villa y comenzaron a hablarles a las personas acerca de Jesús. Luego de escuchar su historia, la gente de la villa insistía en que Jesús ya había estado viviendo con ellos durante muchos años. Vengan, les dijo uno de ellos, se lo presentaremos. ¡Los misioneros fueron conducidos a una cabaña donde se encontraron con un compañero al cual habían perdido hacía mucho tiempo!.

EL por qué de nuestro trabajo siempre determina cómo vivimos.

Lo que haga un hombre no determina si su trabajo es sagrado o perfecto, sino el porqué lo hace.

0 - Opiniones,Anìmate a PARTICIPAR...

Publicar un comentario

Bienvenido a mi pequeño lugarcito dedicado al amor de Cristo..!!! Espero que te sientas còmodo, ya que este sitio fue creado sòlo para vos, para que te sientas contento y alegre, por eso mismo tus comentarios son valiosos para todos los lectores de este blog, desde ya, muchas gracias por visitar nuestro blog.! te espero pronto..! DIEGUIN

Escucha...

Suscribite y recibe el contenido de mi blog

Introduce tu mail:

Delivered by FeedBurner

Tema Controvertido

Reflexión para hoy

Dejame tu mensajito

El Santo de Hoy...


ir arriba